La alegría es una esperanza armada de verdades
Cuando escuché la sentencia por primera vez pensé que era lo suficientemente cursi como para echarla a un lado. Y así fue, particularmente estos últimos años durante los cuales una rabia contenida se fue abriendo camino entre mis poros, como fluidos purulentos, para liberar mi cuerpo y mi alma, de mis frustraciones más amargas. No hay respuestas escritas en manuales frente a las crisis sociales ni las individuales.
Por su parte, las santurronas columnas de inocuos y santurrones columnistas dedicados a defender el status quo —elegantes, delicados, subterráneos— no aportan nada realmente concreto frente a la presente realidad de esta isla que naufraga. Mucho menos veremos expresión alguna sobre la compleja realidad internacional presente. Nada, por ejemplo, sobre la realidad en África dónde los ejércitos tribales islamistas han adoptado el genocidio como táctica de la guerra por el control de los bastos recursos minerales de los países de este continente.
Al mirar a mi alrededor, y observar esta noche las estrellas más deslumbrantes del cosmos, vino a mi mente aquél pensamiento. Efectivamente, aunque sea con grandes sacrificios, la alegría es una esperanza armada de verdades…
Por su parte, las santurronas columnas de inocuos y santurrones columnistas dedicados a defender el status quo —elegantes, delicados, subterráneos— no aportan nada realmente concreto frente a la presente realidad de esta isla que naufraga. Mucho menos veremos expresión alguna sobre la compleja realidad internacional presente. Nada, por ejemplo, sobre la realidad en África dónde los ejércitos tribales islamistas han adoptado el genocidio como táctica de la guerra por el control de los bastos recursos minerales de los países de este continente.
Al mirar a mi alrededor, y observar esta noche las estrellas más deslumbrantes del cosmos, vino a mi mente aquél pensamiento. Efectivamente, aunque sea con grandes sacrificios, la alegría es una esperanza armada de verdades…
Olvídate de esos columnistas santurrones que solo se miran el ombligo deslumbrados, mareados y aturdidos con el status quo. Sus gríngolas no los dejan cruzar el Atlántico. Son los que hacen cuenta regresiva para celebran los 1,000 asesinatos (según estadísticas oficialistas).
ResponderBorrarSon los que le dedican energía y letras a la nueva tienda de pantis caros en Plaza Las Américas...
A tí, probablemente te deslumbraron las leónidas... aprovecha y déjate llevar.
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De paso, sabes que tienes par de días "de gracia", para disfrutarlas. Procura ir al lugar de menos luz artificial que conozcas (difícil en Puerto Rico, que relumbra hasta del espacio con tanto alumbrado de embuste).
Quizás pidiendo un deseo cada vez que veas un meteoro ilusionado en ser una estrella fugaz...